Una de las "quinielas electorales" publicadas en un medio local.
Plataforma Cívica San Fernando no cree en QUINIELAS ELECTORALES que pululan por medios locales y redes sociales interesadas. Pero sí nos interesa la opinión de nuestros vecin@s, primero de todo por cómo perciben ellos la gestión municipal en relación a sus problemas y en base a ello y al panorama político local, cómo se orientaría el sentido político de su voto.
En marzo de 2017 hicimos un muestreo de datos a partir de una ENCUESTA a 200 vecin@s de diferentes edades en diferentes puntos del municipio con la colaboración de alumnos de Ciencias Políticas de la Complutense. Sin cocinar datos reflejamos una muestra de cómo se percibía la gestión municipal y la intención de voto directo.
200 personas fueron encuestadas a pie de calle en diferentes puntos del municipio con un cuestionario previamente elaborado al efecto, entre febrero y marzo.
La muestra fue pequeña, pero el resultado era orientativo.
Hoy el contexto político por la volatilidad que lo viene caracterizando en el escenario postcrisis, ha cambiado sustancialmente y para las municipales de 2019 se presenta una constelación de partidos que dará como resultado un pleno fragmentado donde se complicará la gobernabilidad.
Para nosotros lo importante es poner sobre la mesa los temas estratégicos para el desarrollo de la ciudad y problemas de los vecin@s, para que formen parte de la agenda política con independencia de siglas, con el ánimo, de que se debata de manera constructiva sobre propuestas y alternativas.
Asumimos que cada corriente ideológica tenga un modelo de ciudad, con sus matices. Pero es deseable un CONSENSO sobre los problemas, su diagnóstico y posibles soluciones, así como un modelo de ciudad en su forma y gestión que a todos o a la mayor parte represente, incluya e ilusione.
Nuestra ciudad tiene grandes problemas, pero también un gran potencial, y es preciso que entre todos podamos contribuir a resolver esos problemas, e ilusionar a la gente con un proyecto que encare el futuro bien entrado ya el siglo XXI, con sus certezas e incertidumbres.
Somos ya una sociedad democrática madura, y disponemos de más herramientas que nunca para modelar nuestro presente y aspirar a un futuro mejor. La clave está en que sepamos ejercer nuestra ciudadanía con compromiso responsable al margen de veleidades partidistas.
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