Una vez más el obispo de Alcalá de Henares, lanzó un mensaje claramente homófobo en su homilía del pasado 30 de Diciembre en San Fernando de Henares.
Lamentar que nuestro municipio sea escenario de manifestaciones como esta que fomentan el odio al diferente, por razón de orientación sexual o género.
Es grave que desde los púlpitos algunos clérigos como este, fomenten una dialéctica de odio dando alas a la homofobia.
La Santa Madre Iglesia, sobre la que pesa la vergüenza de ocultar los casos de pederastia que afecta a sus sacerdotes por abusos sexuales "contra natura" a niños. Debería reflexionar sobre su discurso respecto de la homosexualidad, es preferible ser abiertamente homosexual y vivir con normalidad una sexualidad entre iguales libremente. Que no dar lugar a reprimidos que con sotana o sin ella abusan de los que no pueden elegir en razón de su edad.
Condenar enérgicamente que este tipo de mensajes lleven parejo el nombre de San Fernando de Henares, y que la Iglesia titular de la patrona del municipio, sea el lugar desde el que se lance este mensaje excluyente en forma de homilía.
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