Aunque pueda parecer mentira, han pasado 22 años de esta colección de fotografías tomadas en enero y junio de 2000.
San Fernando era entonces un pueblo de poco más de 30 mil habitantes que afrontaba con optimismo el cambio de siglo con una situación económica favorable y unas cuentas saneadas. La fachada de la Real Fábrica de paños acababa de haber sido restaurada e integrada en el nuevo edificio del Ayuntamiento y peatonalizadas las calles del centro. La antigua casa consistorial aún mantenía en sus dependencias parte de la actividad municipal y lucía la torre del reloj según quedó restaurada en 1985.
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